Ya que estamos de vuelta, un interante artículo sobre ella de Carlos Perez Conde.
Vuelta
En el quinientos aniversario
de su anexión por las armas a la monarquía castellana, Navarra compra
las dos primeras etapas de la Vuelta Ciclista a España. En el año de la
inviabilidad económica de equipos navarros de élite, Navarra gasta casi
un millón de euros en la salida de la máxima competición ciclista del
calendario estatal profesional. Primera etapa, equipos en lugar de
ganaderías bravas por el recorrido del encierro. Segunda, meta final en
Viana, cuyo Principado ostenta el heredero de la Corona. La presidenta
Barcina cortará la cinta inaugural con sus afilados incisivos. Hacerlo
con tijeras se prestaría a manipulación en denuncias panfletarias de sus
recortes. En la tribuna de invitados, Roberto Jiménez, promotor
político del evento (toda su vida aspirando a un sillón, y ahora otra
vez en un sillín). Lo más llamativo en los meses previos era la
presencia de socialistas como gregarios de los regionalistas: cargos de
libre designación rezagados en el pelotón de las nóminas públicas,
especialmente diestros en coger la bolsa en el control de
avituallamiento. La campaña turística
Navarra, tierra de diversidad
-justificación del desembolso- compaginará la diversidad de paisajes y
gastronomía con la aún mayor diversidad de siglas políticas forales. Las
nacionalistas han renunciado a la formación de equipo único por el
jaleo de las camisetas. Los maillots ciclistas admiten muchas pegatinas
(NaBai, Bildu, Amaiur, Geroa Bai, Sortu, EH Bildu y sus correspondientes
subtítulos con el desglose de siglas integradas), pero el tamaño de los
caracteres tendría que variar en función del territorio por el que
discurriese la etapa (Navarra, País Vasco, Madrid). Innovaciones en la
grafía televisiva: el rótulo de fugados será ilustrado con las
fotografías del popular Santiago Cervera (candidato en su día a la
presidencia del Gobierno) y del socialista Juan Moscoso (candidato a la
alcaldía de Pamplona); si un mismo corredor ostenta dos maillots con
premio, con la de Uxue Barkos, diputada en Madrid y portavoz en
Pamplona; el corredor repescado se anunciará con la imagen de Maribel
García Malo, antes consejera foral y, bien cobrada la cesantía,
repescada como directora del Servicio Navarro de Empleo; las metas
volantes reproducirán el rostro del regionalista Pedro Pegenaute,
siempre dispuesto a figurar en cualquier punto de la ruta político
administrativa; el corredor descolgado será representado por el diputado
Pérez Lapazarán, hábil para dejarse caer hasta el coche de Viscofán y
cobrar las dietas del consejo de administración a costa de una ridícula
sanción económica por dejar de dar pedales parlamentarios en la etapa
reina de la aprobación de los Presupuestos. El gasto económico, una
certeza. Su retorno, una conjetura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario